b. Nociones generales
LAS DANZAS NATIVAS Y TRADICIONALES
Las danzas nativas son aquellas que se crearon en el país; pero como esto es difícil discernirlo siempre, se ha generalizado el concepto de que también son nativas las que, de origen incierto o extranjero, fueron intensamente practicadas en nuestro medio y sufrieron un proceso de adaptación (acriollamiento en su música, su coreografía, su texto, etc).
Debemos destacar que hay danzas de origen netamente extranjero , se incorporaron al país y se practicaron intensamente sin sufrir mayores variaciones, por ejemplo la polca, vals, el shotis etc, no son nativas pero si son tradicionales.
EL FOLKLORE
Los tratadistas no se han puesto de acuerdo en la definición de esta ciencia, cuyo concepto y extensión ha variado con el tiempo. Generalmente se la conceptúa como la ciencia que trata de las manifestaciones o bienes culturales( costumbres, creencias, mitos, refranes, comidas, vestimenta, danzas, etc.) del pueblo que en él han arraigado y han sobrevivido por varias generaciones a la época cultural que pertenecieron.
ORIGEN DE LA VOZ “FOLKLORE”.
La voz folklórica fue creada por el arqueólogo inglés William John Thoms, quien la empleo por primera vez en la revista “ATHENAEUM”, de Londres, el 22 de agosto de 1846. La formo con las voces inglesas “ folk” (pueblo, gente, raza), y “lore” (saber , ciencia), para designar con ella el saber popular, la sabiduría del pueblo no adquirida en las escuelas. Con el mismo o parecido significado se empleo en muchos países.
Los estudiosos versados en esta ciencia reciben el nombre de folkloristas o folklorólogos.
TRADICIÓN
Es según el diccionario de la academia, la “transmisión de noticias, composiciones literarias, doctrinas, costumbres, hechas de generación en generación”.
Consiste en todo lo que- folklórico o no- nuestros antepasados cultivaron y que ha llegado hasta el presente. Así son tradicionales los usos y costumbres, las leyendas, las formas de expresión, los refranes, las canciones, los bailes, y toda otra manifestación de la actividad o del modo de vivir de las generaciones anteriores que fueron conservándose hasta llegar a nosotros.
RESEÑA HISTÓRICA DE NUESTRAS DANZAS
Desde los primeros tiempos de la colonización los españoles trajeron al nuevo continente sus danzas, junto con otras europeas que conocían. Entre ellas se pueden mencionar: la chacona, la gallarda, la zarabanda, el agua de nieve, el paspié, el minué, etc., en el Perú. La seguidilla, el fandango, el zapateo o zapateado, la tirana, y el bolero, en Chile. El minué, la contradanza, y la gavota, en los salones de Buenos Aires, y el fandango, la cachucha y el bolero, en los ambientes populares de la misma ciudad.
Debemos destacar que con el correr del tiempo, a medida que el elemento social se iba modificando por el incremento del número de los nativos americanos- los criollos- que acusaban caracteres y gustos diferentes a los que tenían los peninsulares, las danzas españolas y europeas fueron sufriendo un proceso lento de adaptación de “acriollamiento”, comenzando a bailarse a la manera del país.
La influencia indígena: se hizo notar en nuestros bailes en grado mucho menor que la española y europea, y la única de valor es la incaica (por ejemplo la Kashua, el Kaluyo, el Huayno que se mestizaron con las europeas y dieron origen a formas más modernas que han llegado hasta nosotros. Muy poco influyeron los negros en la formación de nuestros bailes tradicionales, practicaron ellos siempre sus danzas de tambor y su aporte tuvo poca significación.
CENTROS DE IRRADIACIÓN
El más antiguo fue el Perú, cuya capital Lima fue ambiente propicio para las creaciones picarescas y vivas. De allá nos llegaron muchas danzas que pronto arraigaron en nuestro suelo, siguiendo la vía Chile- Del que, la de Bolivia, o ambas a la vez. Entre ellas podemos citar: el Gato, la Zamacueca (progenitora de la zamba, la cueca, la Chilena, y otras danzas), el Bailecito, etc.
El otro centro de irradiación fue la ciudad de Buenos Aires, en cuyos salones no hallaron ambiente propicio las danzas europeas picarescas sino las serias, graves y cortesanas, tales como las contradanzas, el Minué, La Gavota, Las Cuadrillas, etc.
Los bailes europeos de pareja enlazada.- el primero que llegó al país fue el Vals; entró por Buenos Aires, hacia 1800 y tuvo escasa influencia. Pero a mediados del siglo anterior entraron triunfalmente la Polca, la Mazurca, la Habanera, y otros que tuvieron general aceptación.
LAS DANZAS CRIOLLAS EN LA ACTUALIDAD
Pocas son las que aún conservan, y esto en contadas regiones, su vigencia natural, es decir, que se practican espontáneamente entre la población, sin mediar la acción de maestros, folkloristas o tradicionalistas. Estas son las que pertenecen al “folklore vivo”, y entre ellas podemos citar al Gato, la Chacarera, la Zamba, la Cueca, y a pocas más. La mayor parte de nuestras danzas ya no se practican “naturalmente”, cayeron en el olvido, y constituyen elementos del folklore extinto, que la obra de los cultores de la tradición trata de revivir.